jueves, 27 de marzo de 2008

LA INTEGRACION

Ayer cuando volví del show de Antiguas Lunas, enloquecida como siempre, con mi piquete habitual en la cara y mi sensacion de caos, me encontré con un mail de Fede (amigo productor) con el discurso de la presidenta en relación al conflicto de las retenciones. Y como les decía, venia de tocar, con mi conflicto crónico, en carne viva, de como vivir de la música, de mi arte, cuando parece algo utópico. Me encontré disociada. Me volví a parar enfrente de esa dicotomía que me llena de ansiedad entre mi arte y mi hambre, entre lo que "tendría que hacer" (idealmente) y lo que puedo hacer (que no me gusta).
Llegue a mi sesion de hoy, indignada por el discurso de la reina batata, y termine haciendo la siguiente asociacion:

Mi realidad es que ambos aspectos conviven desencontrados en mi, por un lado tengo a mi arte implorandome que piense a largo plazo, que le deje espacio para desarrollarse, porque es lo que soy, mi destino, mi razón en el universo. Entonces me exige que le subsidie la técnica vocal, la performance pianistica, los shows, etc, siempre disconforme. Por el otro lado viene el hambre a gritarme, "estas loca, como le das todo al arte que ni siquiera es algo concreto, yo tengo que comer, entendes Agustina????, que hay mas importante que eso????( mientras me suenan las tripas), y por el otro el arte me dice, "si empezas a sacarme el apoyo ahora me matas!!!!!!!!" y entonces el hambre responde, "pero si yo no como y no tengo techo, ni prepaga, como podes estar pensando en la guitarrita????. Y el arte que me dice, "ya me sacaste el piano, ahora me vas a sacar la técnica vocal, pronto terminare siendo un desastre, y vos sin mi no vas a subsistir porque sos esto, a que te vas a dedicar sino, con que le vas a dar de comer al hambre?".
Pero mi arte no quiere darle de comer a mi hambre, ni siquiera se le pasa por la cabeza que tengo hambre. Mientras que mi hambre, de tanta desesperacion no puede dejar de ver a mi arte como a un oligarca, soberbio y violento.

El tema es que vengo sin lograr sentarlos a charlar. Me quedo en el medio, viviendo en una casa que no es mía, siempre al limite del default. Pero eso si, subsidio mi técnica vocal, mi salud mental, mi desarrollo intelectual y mi imagen se viene a pique cada vez mas. No tengo casa, ni auto, ni hijos, ni proyecto de tenerlos. Mi analista dice que por descuidar a mi ser inferior voy a terminar en el caño (eso lo digo yo).
Pero claro, mi cuerpecito ahora esta con otras necesidades y demanda mas, y como no me ocupe de el antes, tengo que restringir mis subsisdios al arte con lo cual mi disco no se si saldrá a la venta, mis shows irán siendo cada vez menos, porque además tengo que subsidiar a los músicos y movilizar los equipos y demás. Con el tiempo serán menos mis canciones, habrá una recesión de creatividad en mi vida que finalmente acabara con ella. Porque no soy solo un cuerpo que come y duerme, a pesar de ser un cuerpo que tiene que comer y dormir.

Recién hoy hice el click, soy un ser entero, estaría bueno encontrar la manera de que mi hambre y mi arte cedan cada uno su justa parte y logren coexistir. Porque dividida como estoy terminare como este país, condenada a repetir el piquete en la cara, el malestar general y sobretodo la posibilidad de crecer, de ser una artista que puede comer de su arte.

Mi arte no escucha a mi hambre y mi hambre no escucha a mi arte y así terminan ganando mi analista y mi jefe.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Y si te dedicás a escribir?

Anónimo dijo...

NInha: Antinomias... una construccion mental. Equilibrio... una busqueda, dinamica, permanente y sin solucion de continuidad... El compromiso... algo que nos inventamos como un hermano mayor que nos marque la cancha... en si, el dialogo entre las partes y la capacidad de ceder en pos de algo mejor para todos nos hara crecer... lo importante es que niguno puede solo, todos somos necesarios... Chill, conciliar no es renunciar y menos traicionar... No dramatizemos... es solo un gran juego... Aunque parezca de verdad....

Ana Belén dijo...

Es increíble como transmitís. Lo hacés con tus canciones, lo hacés con tus palabras, lo hacés con vos misma.
Esta última reflexión me hizo ver que muchos, por no decir la mayoría, estamos parados frente al mismo camino bifurcado, seguramente con otras opciones distintas a las que describís, pero la pasta base es la misma. Lo que quiero y lo que debo, lo que llena el alma y lo que llena el cuerpo. Espero sepas elegir la mejor opción para vos.

“Trabajar para ganarse la vida está bien ¿pero por qué esa vida que uno se gana trabajando tiene que desperdiciarla trabajando para ganarse la vida?”

Prisma dijo...

Agus excelente el articulo, me ha costado decidirme a escribir en este blog algun comentario y es que tengo panico escenico de blog (no debo ser el unico).
Hay mucha verdad en eso y es que el hambre es muy impaciente
y no tiene vocación de sacrificio(por eso cuestan las dietas),
el hambre es muy animal, no es inteligente, no sabe esperar.
Uno es el lado derecho y el otro el izquierdo de nuestro cerebro,
por lo que estan necesariamente enfrentados y la unica fusión que
existe entre estos opuestos esta en la meditación;
y hay que alcanzar la meditación!!,es dificil,
hay muchos pensamientos que luchan por ponerse en la primera fila y brotar; en parte el arte canaliza algunos, les brinda un comodin de salida para que el hambre no se los coma; en parte se quedan errantes chocando con cada parte de nuestro ser, molestando y perturbando.
Meditar es llevarlos a un dialogo, es lograr que se entiendan, es que consigan una comunion. Sin dialogo no hay Meditacion, sin meditacion no hay comunion, sin comunion no crecemos, no nos desarrollamos,
si no nos desarrollamos pues somos animales, y al ser animales volvemos al hambre.
Si no damos el paso nunca vamos a inventar la rueda.

Te dejo saludos y segui asi.

Anónimo dijo...

juan Pol, esta chica no quiere la rueda, quiere el ascensor, y esta bien, porque todos buscamos eso, y si, modestia morí.
Y no sigas así, rompe con todo, (la idea disco/blog es genial) cuando tenga ideas buenas te las paso, chau.

Anónimo dijo...

Arte:
No conozco mucho de musica (no me andan los acentos, va a ser un post muy accidentado). Se me ocurre un receta basica y alguna variante, vos seguro le vas a cambiar los ingredientes. Podes elegir un artista al que admiras y seguirle los pasos o por lo menos mirar los senderos por los que paso y despues vos decidis desviarte y depues podes volver y volver a rumbear para otro lado. Podes plantearte el hacer algo totalmente diferente, que todavia no hayas visto a nadie que lo haga y tratar de imaginarlo con el maximo detalle posible e ir hacia alli; en el camino por ahi te cruzas con alguien que va para el mismo lado que vos. Mi receta no es muy buenas pero tampoco creo que exista la recetra para hacer tu arte, salvo respetarlo y hacerlo. La musica como la estas haciendo ahora (con grupo con teclado etc.) es una forma de expresion, la musica como la estas haciendo ahora es una herramienta, el arte lo llevas vos adentro. Por ahi en algun momento la circunstancias te llevan a hacer musica con 222 fosforos en una caja roja o con una orquesta sinfonica, o sacando fotos, o escribiendo en un blog. Vos sos la artista y tu arte. Tenes la responsabilidad de ejercitarlo, refinarlo, ejercitarte, refinarte, mejorarlo, mejorarte.
Vida diaria:
La dicotomia es dificil de superar. Tratar de integrar al artista con los piquetes, la heladera para llenar, las cuentas que pagar, los sueldos adelgazados puede llegar a formar parte de tu arte si vos lo elegis. Tambien lo podes pensar alreves que lo mundano filtrado alimente tu arte, Stephen King veia monstruos escondidos en los lavarropas que operaba. Me parece que esta integracion no es sencilla de lograr. Me gustaria creer que todas las vivencias cotidianas filtradas, decantadas, destiladas, por nuestros sentidos mejorados por la experiencia, la educacion, la poesia pueden regar tambien nuestro arte aunque sean solo un par de gotitas. Saludos, MM.